El misterio de la Carabela Santa María

El fin de semana pasado estuve en la Feria de los Vinos, en el Moll de la Fusta y emergió de entremedio de mi estado flotante un aterrorizado signo de exclamación porque en esos momentos caí en la cuenta de que la “Carabela Santa María” había desaparecido.

Este empanamiento mental me sucede bastante a menudo, la verdad es que no le doy importancia, al igual que al hecho de no conocer bien del todo la anatomía del cuerpo humano incluso habiendo sido fiel seguidora de “Érase una vez la vida” y una enamorada de ese sabio hombre de pelo blanco y una zanahoria por nariz, pero me estoy yendo por las ramas al igual que un mono de culo rojo así que a lo que iba...

Para quien tenga la misma duda que yo, aunque probablemente se lo preguntara hace años ya, os informo de que la Carabela de Santa María se ancló en el puerto de Barcelona el 21 de Octubre de 1963 y tal vez sea que yo soy muy inocente, que sumado al empanamiento es preocupante, pero era una maqueta, no era el verdadero barco. Así que sin llegar a tener la edad oficial ya me habían vendido la moto!!

El 23 de Mayo de 1990 Terra Lliure atenta contra la misma causando graves desperfectos en la nave. Esta acción se realiza como respuesta a la celebración del V Centenario del Descubrimiento de América

Y parece ser que en el 92 molestaba debido a la construcción del puente del Maremagnum y en vez de restaurarla o trasladarla a otro lugar la hundieron a 100 metros del puerto. Es decir, que en cierta manera sigue con nosotros...

De todos modos... esta desaparición tan repentina y la poca información que ofrece Internet... ¿podría ser debido a que mientras todos miraban como Antonio Rebollo encendía el pebetero del Estadio Olímpico, un grupo encubierto del Estado esparció por el aire una bacteria que insuflada nos implantaba en el cerebro teorías confusas sobre su desaparición?

Independientemente de este descubrimiento, paralelo al de Colón... siempre guardaré como un buen recuerdo las visitas a la Santa María, me hicieron sentir como un pirata a punto de embarcarse en una historia llena de tesoros, ron y olor a mar. No hubiese estado de mas que hubieran despedido al barco con todos los niños que disfrutaron en su interior y por supuesto con Jose Luis Perales cantando una canción (los niños mirando desde fuera y es que las frases son muy traicioneras)

Tengo que agradecer que gracias a esta investigación he sabido entre otras muchas cosas, que fue Antonio Rebollo y no Fermín Cacho el que encendió la antorcha, estoy fatal!

Gracias a todas las fuentes de información que han sido muchas y raras. Sin todos ellos esta investigación no hubiese sido lo mismo (ja,ja,ja)

En este caso se podría decir que preguntando, a veces, no se llega a tantos sitios como queremos creer...