16 de septiembre de 2008

Desilusión y esperanza


El otro día recibí una mala noticia: mi manuscrito que esperaba que publicaran, no lo van a publicar. Alguien ha puesto una piedra sobre una historia que quería volar, y me han quitado unas cuantas plumas de las alas. Con este rechazo también me hicieron una herida en mi autoestima, que me estuvo doliendo un par de días.

Hoy veo las cosas de otra manera, por suerte casi todas mis heridas cicatrizan rápido y creo que sé la razón. Alguien me dijo hace poco que se pasaba días sin abrir el buzón porque sólo le llegaban cartas del banco. Yo abro cada día el buzón (sólo una vez, tampoco estoy obsesionada), porque siempre espero algo. No sé exactamente el qué, también me sucede con el mail, con el teléfono, con la gente en general...

Siempre espero que la vida me sorprenda de alguna manera (si puede ser para bien), y la esperanza hace que las cosas malas me duelan menos. Y es lo que hace que aunque nos pongan piedras sobre las alas, aún intentemos volar.

3 comentarios:

Naida dijo...

Míralo desde el otro lado, como mínimo te han publicado un libro, y no todo el mundo puede presumir de eso, seguro que has plantado un pino también (ref. oda escatológica) y todo lo que te queda por hacer, publicar y conseguir.

Además, quien te dice que no te lo publicarán en otras editoriales? No pierdas la esperanza, yo espero volver a ser la primera en conseguir el siguiente libro.

SERGI dijo...

Leí el primero y esperaba comprarme para dentro de poco el segundo, por lo visto tendré que esperar un poco, pero no importa lo que tardes en publicarlo lo que importa es lo bien que me lo pasaré el día que lo lea, ya que publicarlo es un hecho consumado

momo dijo...

Ya! tú lo haces a propósito para generar espectación, no?? Sabes que hay un montón de gente esperándolo.