Mi mandala

Hay información que se comparte y acaba no yendo a ningún lado y hay otra que condiciona tu vida y te la gira ligeramente para que escojas otro camino. Hace poco me enseñaron lo que eran los mandalas, hace menos me apoyaron para que siguiera con ellos y a día de hoy me he vuelto loca y tengo uno de metro cuarenta x noventa encima de la cama.

La palabra "mandala" proviene del sánscrito y siginifica Círculo Sagrado. Es un símbolo de sanación, totalidad, integración, un absoluto. Se basa en un círculo, lo que sería la forma perfecta, forma que representa también el símbolo del cosmos y de la eternidad. Se podría decir que casi todo en nuestra vida tiene forma de círculo (el sol, la luna, los planetas...hay círculos en las flores, en los árboes, los átomos, las células...)

Dicen que dibujar mandalas puede ayudar a curar la mente, así como manifestar nuestra energía creativa y conectarnos con nosotros mismos para así, si es nuestra intención, esparcir nuestra energía a todo lo que nos rodea, personas y cosas. Es una forma de meditación. Personalmente opino que sea o no algo espiritual o ayude a curar el interior...a mí me ha ocurrido una cosa muy curiosa pintándolo.

Tenía una gran necesidad de empezar con él, para desconectar de todo y curiosamente...me ha llevado a recordar un montón de momentos buenos con Escarlata, me vienen tantos a la cabeza cuando empiezo a pintar que en realidad, hacer este mandala es como un dibujo nuestro donde se está poco a poco manifestando en colores todo lo que significaba para mí nuestra amistad. Así que este mandala está dedicado a ella, a mí y por extensión a todo aquel que pueda beneficiarse de la energía que espero esté desprendiendo hacia afuera

Para tí (el inicio)


















Para mí (la continuación)

















Para todo y todos los que me rodean (como siga...)














Pero el final final será sólo para tí