20 de agosto de 2008

Nils Holgersson

El verano pasado estuve en una isla alemana que está muy cerca de Suecia. Estaba paseando por una de sus larguísimas playas, intentando apartar restos de medusas (que allí son del todo inofensivas) cuando apareció cruzando el cielo completamente azul una bandada de gansos silvestres.
Me acordé de Nils Holgersson, el protagonista de ese cuento en el que un duende castiga a Nils porque ha sido malo haciéndole pequeñito (debería de medir unos 15 centímetros). Y Nils se marcha con un ganso blanco de su granja a volar con los gansos silvestres por toda Escandinavia.
Nunca había visto gansos silvestres, pero eran como en la serie, marrones y negros, y volaban con una elegancia que me dejó pasmada mirándolos.
Ese es otro de mis sueños imposibles: irme a volar con los gansos silvestres. Me gustaría que por ser mala me castigaran de esa manera, escapándome a un viaje por las nubes, colgada de un ganso…

http://es.youtube.com/watch?v=AzCygWJD4Og

¿Por qué la vida no se parece más a los cuentos?



2 comentarios:

momo dijo...

Bonito sueño..Yo de ti me pondría manos a la obra y empezaría a portarme un poco mal.. además puedes aprovechar que casi todos están de vacaciones y tendrás pocos testigos.. ;-)

Antonieta dijo...

Qué pasada... me has hecho recordar que otro de mis deseos sería volar sobre un perro como el de La historia interminable...